Alrededor de siete niños han dejado de trabajar en calles y cruceros de Xalapa, se trata de menores a quienes les han sido restituidos sus derechos para que no regresen a laborar o pedir dinero las vialidades.
La secretaria técnica del Sistema Municipal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), Mercy Esther Pérez Arévalo, dijo que con esa estrategia implementada desde hace 18 meses buscan proteger y prevenir los riesgos a los que se enfrentan los niños y niñas, así como los adolescentes que se encuentran trabajando en esos sitios.
«Por desgracia esa es una problemática de muchos años, que no es posible ni fácil erradicar de un día a otros, sino que hay que empezar a hacer una restitución paulatina de los derechos de las niñas y niños que están en este contexto de trabajo en calle», dijo.
Indicó, que es complicado poder sacarlos de la forma en la que viven; sin embargo los pocos que han sido rescatados se les brinda toda la atención, canalizándolos con los programas sociales del gobierno federal para que no tengan la necesidad de regresar a las calles.
«Estamos haciendo la vinculación con todas las áreas, con los programas federales para los apoyos y becas, para ellos y las mamás, con la educación, sus útiles escolares, de mejorar las condiciones para evitar que regresen a la calle».
La funcionaria, destacó que se debe trabajar en cambiar la también del automovilista, y de la sociedad en general para que no que los discrimine por el hecho de que esté vendiendo algo, pues se da en muchas ocasiones que los insultan o ignoran y esas actitudes genera en los menores una baja estima.
«Hay que ser muy honestos, porque muchas veces a esta población se les terminan las opciones, parece que no hay salida, y optan por la calle porque creen que esa es la forma en que así vivieron los papás y así podrán vivir siempre, lo que tenemos que ver es qué alternativas podemos brindar como ayuntamiento y que la gente cambien su perspectiva de verlos y no los discrimine».