25 de abril de 2024

Quien compre votos, tiene pase directo a la cárcel: Rosa María Hernández Espejo


*Ciudadanía debe votar en las elecciones más caras del mundo
*El votante debe estar vigilante a cierta distancia de principio a fin
*Los funcionarios sentirán presión si tienen muchos ojos encima
La responsabilidad ciudadana en estas próximas elecciones es estar pendiente del proceso electoral, al ser los principales vigilantes de que la elección tenga legitimidad y transparencia, expresó la Candidata a Diputada Federal del Distrito 4 de Veracruz por Morena, Rosa María Hernández Espejo.
Mencionó que los comicios ya no son como antes, en que el votante solía levantarse temprano, ir a la casilla, emitir su voto, irse a su casa y esperar los resultados a través de los medios de comunicación; un hábito que era de provecho para la oposición porque era el momento ideal para cometer irregularidades.
“Hay que ir a la urna a votar, y hay que cuidar luego la casilla, estar vigilando. Ccuando ya empiece el conteo, asomarse y estar ahí como vecinos, porque el hecho de que vean los funcionarios de casilla a los vecinos ahí, sienten la presión. Si ven algo raro, algún delito, porque acuérdense que el fraude electoral ya es delito, que es algo que se aprobó por Morena, es cárcel a fuerza. Todo aquél que ande comprando votos ese día a la cárcel, y si ustedes nos mandan video o nos hablan por teléfono, nosotros llegamos de manera inmediata con la Fepade y con la policía, porque ahora sí ya no hay que dejarse”, señaló.
Hernández Espejo indicó que se tendrán líneas telefónicas y comunicación vía internet, que estarán destinados especialmente a la ciudadanía para que puedan -casi en tiempo real- informar de las anomalías, irregularidades y delitos que se estén desarrollando en las casillas instaladas en sus colonias, fraccionamientos, predios, reservas, comunidades y zonas suburbanas.
La periodista de profesión afirmó de manera firme que se trata de uno de los procesos electorales más importantes y costosos de la historia como para que el pueblo no se involucre a su vigilancia, desde que se abre todo el material de casillas, se coloca el material electoral, hasta que se desarrolla la votación, se levanta la mesa, se embala la urna, hasta que llega al Órgano Público Local Electoral (OPLE).