Más, mucho más que un slogan de campaña. El “POR EL BIEN DE TODOS, PRIMERO LOS POBRES”, es la síntesis de una concepción de gobierno que, se fija como objetivo principal, el de velar y tratar de resarcir los daños que una política excluyente en todos los aspectos, económico, social, cultural, etc. causó en millones de personas que, al verse obligadas a trabajar con sueldos de miseria, no fueron capaces de generar una pensión que les permitiera, como dice el presidente López Obrador, andar el ultimo tramo de su vida con dignidad.
Contrario a lo que se hacia en otras economías, que, para incrementar los márgenes de utilidad, se implementaban estrategias para aumentar la productividad o se daba impulso a la innovación, en México se optó por el camino fácil de precarizar los salarios y ese diferencial trasladarlo a sus utilidades, las cifras de pérdida de poder adquisitivo de los ciudadanos es monstruosa y refleja la indolencia y el cinismo de una clase política que ha entendido o entendía que, las instituciones gubernamentales, el gobierno todo debía trabajar y obrar solo en favor de la acumulación de capital, no es gratuita la cantidad de multimillonarios que padece el país, a cual mas cínico y corrupto, y que, en nuestros días, solo por deporte hacen campaña en contra del proyecto de transformación, ya que se han hinchado sus bolsillos aun y cuando han debido, como cualquier causante, pagar impuestos, ah como les duele.
Esta estrategia económica la de favorecer a las capas mas necesitadas del país, es, además de un imperativo ético, una política redistributiva que favorece ampliamente el consumo doméstico y por tal fortalece el mercado interno de una manera muy evidente.
Se ha roto el mito neoliberal de que la contención salarial era una herramienta necesaria para evitar la inflación, en este sexenio se ha incrementado el salario casi en un 100 por ciento y aun y cuando, por la dinámica de reactivación económica post Covid y la guerra ruso-ucraniana se experimentó una espiral alcista en la inflación, esta ha cedido y tiende a la baja y se acerca a la meta del Banco de México que la ubicó en los criterios de política económica en un 3 %.
Al ser el modelo mexicano una economía de mercado, en donde existe la libre competencia, es necesario favorecer el consumo final que es el evento o fenómeno económico en donde, según la teoría política de Carlos Marx, se realiza la plusvalía, es decir, esta sufre una metamorfosis y se convierte en la ganancia del dueño de los medios de producción, este mercado requiere sobre todo de agentes participantes, en toda la cadena de valor, así tenemos que para la producción de servicios o mercancías requiere de proveedores y de fuerza de trabajo, hoy denominada mano de obra, al concluir el proceso de producción, la mercancía entra al ciclo de la distribución, este ciclo se mueve en un universo monetario, mientras mas numerosos son los consumidores, las mercancías encuentran rápido acomodo en estos y el ciclo se dinamiza, es una medida que tranquilamente puede ser denominada como pro capitalista, sin ningún rubor.
En otras latitudes, estas políticas asistenciales, como los programas sociales de le gobierno federal, tuvieron su origen en la amenaza que significaba la influencia soviética en los estados europeos, de esta manera se crearon los llamados estados de bienestar, apoyos para salud, vivienda y trabajo , los países que hasta la fecha han mantenido estas políticas, año con año son reconocidos por sus estándares altos de bienestar, quizá como son güeritos y de ojos claros, no se les llama populistas, acá un presidente de piel no tan blanca y hablar popular, pues es, a todas luces, ante la minoría rapaz que se ostentaba dueña del país, un populista.
En días pasados el INEGI dio a conocer la encuesta que levanta cada dos años y cuyos resultados se presentan un año después del levantamiento de mas de 150,000 encuestas, así que los números presentados corresponden al bienio 2020-2022, si consideramos la dinámica permanente de incorporación de personas a los programas sociales, a la alza salarial y a la generación empleos, podemos inferir que las estadísticas, al día de hoy, presentan cifras aun mas alentadoras de las que dio a conocer el presidente en su conferencia mañanera del día 27 de julio del año en curso,
La encuesta llamada ENIGH Encuesta Nacional de Ingresos y Gasto en el Hogar, arroja cifras alentadoras que servirán de base para que en dos semanas se conozca el impacto que estos datos reflejan acerca de el comportamiento de la pobreza en México, los datos por lo pronto nos hablan de una disminución en la desigualdad que por años se ha sufrido en nuestro país.
Datos presentados por el presidente López Obrador y que nos reflejan el resultado de una reorientación de la inversión social, que no es gasto, según palabras del propio presidente de la república.
1.- El ingreso laboral para el 10% de los hogares mas pobres, se incrementó, en promedio, 29% del 2018 al 2022, en términos reales.
2.- Por programas sociales, de 2018 a 2022, hubo un aumento real de 24%, para el 10% más pobre, en comparación con 2016-2018 que se redujo en un 17%.
3.- De 2018 a 2022 las becas para el 10% mas pobre, aumentaron 187%, de 2016 a 2018 se redujeron en 55%, para el siguiente decil mas pobre, de 2018 a 2022 aumento en un 15%, y de 2016 a 2018 disminuyeron en 0.2%.
4.- En salarios, para el 10% mas pobre de 2018 a 2022 fue de 41% real, mientras que de 2016 a 2018 se redujo en un 5%. Para el segundo decil, este aumento fue de 15% de 2018 a 2022, mientras que de 2016 a 2018 fue solo de 3%.
5.- Por trabajo independiente, para el 10% mas pobre, el incremento fue de 19.1%, de 2018 a 2022, mientras que de 2016 a 2018 fue de 15.4%, para el siguiente decil fue de 18.7 y 7.4% respectivamente.
6.- La brecha de ingresos entre los más ricos y los más pobres disminuyó, esto es la desigualdad. De 2016, los más ricos ganaban 21 veces más que los pobres; en 2022 se redujo a 15 veces.
7.- Los más pobres ganan 20.4% más que en 2016 en términos reales.
8.- Los ingresos de los más ricos decrecieron un 13.2% durante el mismo periodo. Es el único decil con variación negativa, aunque, de 2020 a 2022 ya aumentaron sus ingresos en 7.8%.
9.- Por aguinaldo y reparto de utilidades, el incremento para el 10% más pobre de 2018 a 2022 fue de 16% en términos reales, mientras que de 2016 a 2018, de hecho, decreció en 1.9% en términos reales
10. Los Programas para el Bienestar permitieron que de 2018 a 2022 los adultos mayores incrementaran su ingreso promedio trimestral por persona de 20 mil 322 pesos a 23 mil 738 pesos.
11.- En cuanto a la población que se considera indígena o habla alguna lengua indígena, de 2018 a 2022 pasó de un ingreso trimestral por persona de 16 mil 905 pesos a 18 mil 428 pesos, es decir, nueve por ciento más en términos reales.
12.- En el campo, los más pobres aumentaron sus ingresos 20 por ciento.
Estos datos no reflejan los estados de animo de la población, personas que en el medio rural, por vivencias y platicas que uno escucha, al llegar visitantes de las ciudades acudían presurosos a ver si es que les habían llevado algo, hoy no se ven esas escenas, las personas atildadas , modestas pero bien vestidas, reciben al visitante con un pequeño presente, para los estudiosos de la técnica demoscópica y estadística, esto puede no decir nada, para quienes han entendido que, esta ruta, este ejercicio de gobierno tiene como principal objetivo el de incrementar el estado de bienestar de los más pobres es un orgullo y una sensación de deber cumplido.
Estos datos han hecho reaccionar a los escribanos de la derecha, son incontables artículos de opinión con un fin único, generar una percepción de que, en realidad, las cifras, lejos de ser una buena notica, son todo lo contrario, vamos la opinión de Mario Luis Fuentes, académico ligado al PRI y con una concepción neoliberal, el cual tuvo, en su tiempo, oportunidad de participar en la instrumentación de políticas publicas orientadas a la disminución de la pobreza, políticas de maquillaje y mentiras, clientelares y paternalistas que mantuvieron por años el statu quo que por décadas significo pobreza, abandono y desigualdad, veamos al experto.
“Por ejemplo, en los resultados dados a conocer, se encuentra que los hogares mexicanos gastaron más en alimentos respecto de lo que ocurrió en 2018. Aparentemente esa debería ser considerada en automático como una “buena noticia”; sin embargo, si el dato se cruza con los resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT), lo que se encuentra es que lo que está consumiendo la sociedad mexicana son cada vez más alimentos de mala calidad, en tanto que contienen grasas polisaturadas; es decir, calorías de mala calidad que están profundizando la epidemia de obesidad y sobre peso que aquejan a todo el país.”
“La ENIGH registra un mayor número de personas trabajando, pero lo están haciendo en jornadas laborales cada vez más extenuantes y en condiciones de informalidad laboral. Sin duda es preferible que las personas ganen más dinero; pero la pregunta es si esto puede festejarse cuando es a costa del su bienestar psicobiológico; de la pérdida de tiempo de convivencia familiar; y de la agudización de las condiciones de trabajo doméstico no remunerado para las mujeres.”
Como dice el presidente López Obrador, si la ensartas, pierdes, si no la ensartas, también.
Cuánta razón tenia Enrique Peña Nieto con aquello de “Ningún chile les embona”.
