La reactivación del corredor del Istmo de Tehuantepec, una vía de comunicación estratégica para el país, que fue abandonada por los gobiernos neoliberales, está viendo con el presidente Andrés Manuel López Obrador un nuevo destino, un nuevo amanecer. La apuesta por la infraestructura ferroviaria, en donde se puede incluir el proyecto del tren maya y del recién inaugurado tren México-Toluca, es visionaria y única de este gobierno de la Cuarta Transformación.
“Viajamos en el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, de Salina Cruz a Coatzacoalcos; la gente de los pueblos está eufórica. La voz del pueblo, según los laicos, es la voz de la historia y, según los creyentes, es la voz de Dios”, escribió el mandatario mexicano en sus redes sociales este fin de semana al hacer por primera vez el recorrido de aproximadamente 308 kilómetros.
Hace apenas algunas semanas, el mandatario mexicano realizó un recorrido de prueba por el Tren Maya, en el sureste del país, una obra emblemática de su gobierno y apenas el pasado 15 de septiembre, para simbolizar los logros de la 4T en esta fecha histórica, inauguró un tramo del Tren Interurbano México-Toluca, un tren de pasajeros de alta velocidad que conectará la capital del Estado de México con el poniente de la Ciudad de México.
Este lunes en la mañanera, revivió la experiencia del recorrido que hizo en el Istmo de Tehuantepec. “Imagínense lo que es tomar el tren en la antigua estación, de Salina Cruz, pasar por Ixtepec, pasar por Matías Romero, pasar por Medias Aguas, llegar a Coatzacoalcos. La gente estaba muy contenta. Salían de todos los pueblos, de todos los pueblos a saludar, con banderas. Había euforia. La gente muy contenta”, destacó el jefe de las instituciones del país.
“Ya vamos avanzando. Este tren va a empezar a dar servicio en diciembre, con horario de salida de Salina Cruz a Coatzacoalcos y de regreso. Pueden ser una o dos corridas diarias. Cuando se termine para marzo, el de Palenque a Coatzacoalcos, lo mismo y cuando terminemos, que es la línea más extensa, más larga, del Istmo, que es de Ixtepec, hasta la frontera con Guatemala, que son 450 kilómetros, pensamos terminarla en julio del año próximo. Aquí hay algo muy importante. De Palenque ya inicia el Tren Maya que es toda la península, son 5 estados y son mil 554 kilómetros”, destacó.
Esta apuesta del mandatario mexicano es sin lugar a dudas visionaria y permitirá, en el caso de Veracruz, detonar el desarrollo de mi querida ciudad Puerto México y de todos los municipios circunvecinos. Este tren tocará, naturalmente, los municipios de Acayucan, Agua Dulce, Ángel R. Cabada, Catemaco, Coatzacoalcos, Cosoleacaque, Chinameca, Hidalgotitlán, Hueyapan de Ocampo, Isla, Ixhuatlán del Sureste, Jáltipan, Jesús Carranza, Juan Rodríguez Clara, Las Choapas, Mecayapan, Moloacán, Minatitlán, Nanchital, Oluta, Oteapan, Pajapan, Playa Vicente, San Andrés Tuxtla, San Juan Evangelista, Santiago Tuxtla, Sayula de Alemán, Soconusco, Soteapan, Tatahuicapan, Texistepec, Uxpanapa y Zaragoza.
Los mexicanos y los veracruzanos naturalmente, estamos viviendo momentos únicos en la historia del país. El desarrollo y la bonanza están llegando a todo el sureste mexicano, abandonado y saqueado por los gobiernos neoliberales. El Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, con sus Polos de Desarrollo para el Bienestar detonará un cambio estructural en la región. Estos primeros polos, que ya están en marcha, son el Coatzacoalcos I, el Coatzacoalcos II, Texistepec, San Juan Evangelista y Salina Cruz.
Las próximas generaciones recordarán sin duda este momento, cuando el sureste mexicano se volvió protagonista en el desarrollo de México. Y lo más importante, no sólo para que la élite del poder o los hombres de dinero se seguirán enriqueciendo. No, todo esto es para beneficio de la gente, del pueblo, los únicos, los auténticos protagonistas de la historia que corre, la única razón de la Cuarta Transformación en el país.
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