20 de abril de 2024

Versión estenográfica. Inauguración de instalaciones de la Guardia Nacional, en Ensenada, Baja California

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Amigas, amigos de Ensenada:

Me da mucho gusto estar de nuevo en este histórico municipio de Ensenada, en Baja California.

Primero, quiero reiterar mi reconocimiento al pueblo de Ensenada y a sus autoridades, de manera muy especial a Armando Ayala Robles, presidente municipal; desde luego también al gobernador Jaime Bonilla; pero de manera especial al pueblo, a la gente de Ensenada, por haber aceptado que del territorio de Ensenada naciera el nuevo municipio de San Quintín.

Esto es una muestra de solidaridad, de hermandad, algo muy importante y no poca cosa, porque Ensenada era el municipio con más extensión territorial en el país y a partir de que se toma la decisión de crear, de constituir el nuevo municipio de San Quintín, ya Ensenada no tiene la misma extensión territorial.

Pero ganó mucho, por su proceder solidario, fraterno. Ganó más. No todo tiene que ver con lo cuantitativo, a veces hasta las cosas más importantes son pequeñas, lo pequeño es hermoso; más, cuando se trata de bondad, de fraternidad. De modo que me da mucho gusto estar aquí.

Otro motivo de satisfacción es estar en Ensenada, en esta ciudad que vio nacer al general Luis Cresencio Sandoval González. De aquí es originario, este es su pueblo, su ciudad natal, aquí estudió el kínder, la primaria, la secundaria, el actual secretario de la Defensa.

Y también por eso le agradezco al pueblo de Ensenada, porque el general Sandoval González es un colaborador, un servidor público de primer orden, un militar leal a las instituciones y sobre todo leal al pueblo, un hombre honesto que me ayuda mucho, me quita carga, me aligera la carga que se tiene cuando se gobierna a México con responsabilidad, con entrega, por eso también me da gusto estar aquí en Ensenada.

Y estamos, como lo mencionó el gobernador Jaime Bonilla, inaugurando estas instalaciones de la Guardia Nacional, que también es una institución nueva y en poco tiempo muy aceptada, reconocida por la gente.

Ayer mencionaba que en las encuestas que hace el Inegi, cuando se le pregunta a la gente sobre la confianza que le tienen a las instituciones, están en confianza en primer lugar la Secretaría de Marina y la Secretaría de la Defensa, y en segundo lugar la Guardia Nacional con más de 70 por ciento de aceptación. Desde luego, Marina y Defensa más de 80 por ciento de aceptación en la población.

Estamos constituyendo esta nueva institución para garantizar la paz, la tranquilidad en nuestro país y se ha ido avanzando. Apenas estamos cumpliendo dos años y medio y ya se logró una reforma constitucional para que las Fuerzas Armadas nos ayuden en la tarea de garantizar la seguridad pública; porque antes no estaba permitido, la Constitución no le permitía a las Fuerzas Armadas participar en labores de seguridad pública, algo que resultaba hasta absurdo porque ¿cómo no echar mano de dos instituciones tan importantes como la Secretaría de Marina, la Secretaría de la Defensa, para enfrentar el grave problema de la inseguridad y de la violencia en el país, lo que más le preocupa a la gente?

Pero no se podía contar con el apoyo de la Secretaría de Marina, la Secretaría de la Defensa. Con la reforma constitucional ya se abre esa posibilidad y se creó la Guardia Nacional, y en poco tiempo ya se cuenta con alrededor de 100 mil elementos de la Guardia Nacional. Estamos hablando de cinco veces más de lo que representaba la Policía Federal, sólo en elementos, porque la Policía Federal llegó a tener 40 mil servidores públicos, pero la mitad estaba dedicado a tareas administrativas y el personal operativo era de alrededor de 20 mil, ahora son 100 mil elementos de la Guardia Nacional.

Durante el tiempo que funcionó la Policía Federal no se hicieron cuarteles, no había instalaciones, mandaban a los operativos a los elementos de la Policía Federal y tenían que acampar o vivir en hoteles, en situaciones muy indignas y no decorosas, como lo merecen los que protegen a la gente, los que tienen como encomienda garantizar la paz y la tranquilidad.

Ahora no. Se acaba de informar que ya son más de 160 cuarteles como este en todo el país y vamos a tener el año próximo 266, y es posible que se amplíe el número de cuarteles para que tengamos arraigo territorial.

Porque, también, cuando existía la Policía Federal no estaban permanentemente en el territorio, eran operativos que se llevaban a cabo cuando se salía por completo de control la situación de violencia. Ahora lo que queremos es tener en todo el territorio nacional presencia de la Guardia Nacional y para eso estas instalaciones. De modo que vamos avanzando.

Y también he dado instrucciones para que los sueldos, las prestaciones de los elementos de la Guardia Nacional estén a la altura del esfuerzo, de la labor, del trabajo tan importante que desempeñan, que no se queden rezagados, que tengan sueldos y prestaciones decorosas.

¿Cómo vamos a obtener presupuesto?, ¿de dónde va a salir?

Pues está saliendo el presupuesto de los ahorros que se tienen, que son muchos cuando no se permite la corrupción. Siempre he dicho que la corrupción hay que combatirla no sólo por razones de índole moral, sino porque es mucho lo que se va por el caño de la corrupción. Cuando no hay corrupción, el presupuesto rinde, alcanza.

Y el mejor ejemplo es lo que hemos hecho en este tiempo. Aún con la pandemia, no aumentamos la deuda pública. Era fácil, y así lo hicieron muchos países, contratar deuda para enfrentar la crisis económica desatada por la pandemia; nosotros no endeudamos al país, no aumentamos los impuestos, no aumentó el precio de las gasolinas, del diésel, del gas, de la luz y no va a aumentar.

¿Y cómo tenemos presupuesto?

Bueno, porque no hay corrupción, porque antes no se cobraba impuestos a los de mero arriba, se les condonaban los impuestos.

Imagínense una corporación, una gran empresa, un gran banco, imaginen el que quieran; pues ese banco, esa empresa que están pensando, famosa, no pagaba impuestos. Pagaba impuesto el pueblo, porque en todo lo que se consume va incluido un impuesto, y desde luego los trabajadores y los pequeños, medianos comerciantes, empresarios, pero los de mero arriba no pagaban y cuando pagaban se les devolvían los impuestos, y no estoy hablando de cientos de millones, miles de millones de pesos.

¿Qué se hizo?

Se estableció el artículo 28 de la Constitución la prohibición de la condonación de impuestos.

¿Y eso qué nos ha traído de beneficio?

El que ahora tenemos más recaudación.

Lo mismo, ya no hay el huachicol que había, el robo de las gasolinas. Se robaban 80 mil barriles diarios de gasolina en tomas clandestinas, lo bajamos a cuatro mil. Nos cuesta trabajo y ahí está el Ejército y ahí está la Marina y la Guardia Nacional, pero no es lo mismo 80 mil que cuatro mil. Todo eso ha significado ahorros.

Y también se terminaron los lujos en el gobierno. El último año de la pasada administración la Presidencia de la República ejerció un presupuesto de tres mil 600 millones de pesos, este año nosotros vamos a ejercer 600 millones, de tres mil 600 a 600, porque nada de lujo, no puede haber gobierno rico con pueblo pobre.

Por eso tenemos presupuesto, por eso podemos crear, constituir la Guardia Nacional, que es fundamental para garantizar la paz y la tranquilidad, porque podemos tener crecimiento económico, incluso mejorar las condiciones de vida, de trabajo, pero si no hay seguridad no se avanza, eso es fundamental.

Estamos muy conscientes que lo vamos a lograr. Vamos avanzando poco a poco, porque estaba muy avanzando el mal, sobre todo se le dio la espalda al pueblo durante muchos años, se abandonó al pueblo, se abandonó a los jóvenes y por eso se desató la violencia; pero ahora con una mano estamos ayudando al pueblo, atendiendo a los jóvenes que no sean enganchados por la delincuencia, que tengan garantizado el derecho al estudio, el derecho al trabajo y muchos programas de bienestar, y lo otro es tener corporaciones como la Guardia Nacional, incorruptibles.

Antes no estaba bien pintada la raya, no estaba definida la frontera entre delincuencia y autoridad, eran en muchos casos lo mismo delincuencia y autoridad; ahora no, ahora por un lado está la delincuencia y por otro lado, enfrente, la autoridad. Ya no hay esa mezcla, ese contubernio.

Y no se permite la corrupción y no se permite la impunidad, y se está estableciendo un auténtico Estado de derecho; antes lo que había era un Estado de chueco.

Ahora sostenemos como lo llevaron a la práctica a los liberales en su momento: al margen de la ley, nada; por encima de la ley, nadie.

Por eso es que me da mucho gusto estar aquí en Ensenada inaugurando esta nueva instalación, este cuartel de la Guardia Nacional y vamos a seguir adelante todos juntos.

Lo mencionaba el general Sandoval, cómo todos los días de lunes a viernes desde Palacio Nacional nos reunimos de 6:00 a 7:00 de la mañana todo el Gabinete de Seguridad. Nosotros recibimos el reporte diario, el parte de lo que sucede en todo el país y esa reunión, en donde estamos juntos la Secretaría de la Defensa, Secretaría de Marina, la Secretaría de Seguridad Pública, la Consejería Jurídica, la Secretaría de Gobernación, estamos juntos todas las mañanas.

Se replica en los estados y queremos que eso se replique también en las unidades territoriales de la Guardia Nacional. En donde exista un cuartel tienen que reunirse autoridades civiles y militares muy temprano para saber qué sucedió en la demarcación que le corresponde, cómo se están comportando los delitos, en dónde hay más delitos, en dónde se necesita tener más presencia y diariamente darles seguimiento a los problemas de inseguridad y de violencia, así vamos a consolidar este sistema de apoyo a la seguridad pública.

Me da también muchísimo gusto que la secretaria de Seguridad Pública y de Protección Ciudadana sea una mujer consecuente, trabajadora, honesta, inteligente, como Rosa Icela Rodríguez. Ella coordina el Gabinete de Seguridad y todos estamos trabajando juntos.

El almirante Ojeda Durán, secretario de Marina, también, un hombre íntegro, honesto, leal. Todos juntos. No hay fisuras, ni en el Gabinete de Seguridad ni en el gobierno. Estamos trabajando unidos todos, sirviéndole al pueblo, que es nuestro amo, nuestro único amo el pueblo de México.

Nosotros estamos gobernando el país, porque de manera legal y legítima lo quiso el pueblo de manera democrática. No somos empleados ni peleles, ni títeres de ningún grupo de interés creado, nada más le debemos respeto y lealtad al pueblo de México, eso es una garantía.

Estuvimos por la mañana en San Quintín y recuerdo que durante la campaña un migrante de San Quintín, un maestro de Puebla me alcanzó después de que se terminó un mitin, porque quería decirme algo, y no se me va a olvidar lo que me externó, me dijo:

‘Licenciado, vamos a ganar y ahora que ganemos procure hacer lo que hizo el presidente Juárez, pero ahora no es separar al poder civil del poder clerical, porque a Dios lo que es Dios y al César lo que es del César, ahora no eso -me dijo- ahora es separar el poder económico del poder político para que el gobierno represente a todos a ricos y a pobres, que no sea un gobierno faccioso, un gobierno nada más para los de arriba.’

Ese fue el consejo y eso es lo que estamos haciendo, atendemos a todos, escuchamos a todos, respetamos a todos, pero le damos preferencia a la gente humilde. Por el bien de todos, primero los pobres, esa es la característica, la peculiaridad del gobierno que represento y así vamos a continuar, sirviendo al pueblo y el integrante de la Guardia Nacional.

El marino, el soldado, es pueblo uniformado. No están ustedes en otro mundo o son de otro mundo. Sus padres, campesinos, obreros, comerciantes, soldados, maestros, gente del pueblo, así se han creado las Fuerzas Armadas. Entonces, es el pueblo uniformado para servir al pueblo, el pueblo protegiendo, cuidando al pueblo. Esa es la tarea de ustedes.

Me gustó mucho lo que dijo el general Cresencio Sandoval González acerca del espíritu de servicio, porque es importante la disciplina, es importante el profesionalismo, pero lo más importante de todo es el amor al pueblo, eso es lo más importante, el amor al prójimo, el ser auténticos servidores públicos.

Me dio mucho gusto estar aquí, de nuevo lo expreso en Ensenada y nos vamos a seguir encontrando, voy a estar visitando Ensenada y vamos a seguir beneficiando al pueblo.

Decirle a la gente que hubo elecciones, todo transcurrió bien, la gente se manifestó libremente, no hay movimientos poselectorales, de protesta, el país está en calma, hay gobernabilidad, hay tranquilidad y sí hubo contienda, y lo tengo que decir; además, yo respeto mucho a los adversarios que son eso, adversarios, no enemigos, pero apostaron a que se perdiera y que no alcanzáramos mayoría en la Cámara de Diputados, y se unieron -y eso es legítimo, porque eso es la democracia- con el propósito de que no alcanzáramos a tener mayoría en la Cámara de Diputados.

¿Y por qué les preocupaba más que nada la Cámara de Diputados?

Porque es donde se aprueba el presupuesto. La función, la facultad exclusiva de la Cámara de Diputados es la aprobación del presupuesto, el Senado no tiene nada que ver con la aprobación del presupuesto, es la Cámara de Diputados.

Y, bueno, sin hacer una elección de Estado porque no usamos el presupuesto como era antes, respetando la decisión de la gente; sobre todo, teniendo confianza en el pueblo, porque el pueblo es sabio y tiene un instinto certero.

¿Y cuál fue el resultado?

Que el movimiento afín a la transformación va a tener mayoría en la Cámara de Diputados.

¿Y eso qué significa?

Pues significa que está garantizada la aprobación del presupuesto, el dinero para los pobres, el dinero para los programas de bienestar, el dinero para el desarrollo de México. Eso es lo que se dirimió, lo que se resolvió en esta pasada elección, por eso mi gratitud al pueblo de México, mi respeto al pueblo de México.

Muchas gracias, amigas y amigos.