19 de abril de 2024

ROGELIO “N” CON UNA NUEVA ORDEN DE APREHENSIÓN| EN PRIVADO| POR RICARDO RAMÍREZ JUÁREZ

El pasado 15 de noviembre las jóvenes, Luisa Fernanda Méndez Alvarado, de aproximadamente 26 años, hija de doña Guillermina Alvarado González y de Miguel Fernando Méndez y Viviana Franco Alvarado, hija de Rogelio “N”, Exsecretario de Gobierno en el bienio del panista Miguel Ángel Yunes Linares y de doña Guillermina  Alvarado González, se aparecieron en un céntrico cafetín para dar una conferencia de prensa.

Las dos jóvenes, fueron acompañadas de la señora Mercedes  Castán González, la madre de Rogelio Franco Castán, y aunque casi nadie lo sabe o se le olvida, la culpable de todo este dilema familiar que tiene a su hijo Rogelio Franco Castán, encerrado en un penal veracruzano por diferentes delitos.

Luisa Fernanda Méndez Alvarado y Mina Viviana Franco Alvarado, acusaron que el Gobierno del Estado preparaba una nueva orden de aprehensión contra su padre y contra ellas mismas, utilizando a su señora madre.

Y aunque acusan que el Gobierno del Estado es el autor de la denuncia, nos permitimos ilustrar los antecedentes de esta historia que ahora están a punto de llevar a la prisión a la señora Mercedes Castán González, Luisa Fernanda Méndez Alvarado y Mina Viviana Franco Alvarado, y a Rogelio “N”, por el delito de RETENCIÓN DE MENORES, sumándosele a este último, los varios delitos que lo mantienen en prisión.

Rogelio “N”, siendo estudiante de derecho en esta ciudad capital, se juntó con la señora Guillermina Alvarado González, quien tenía bajo su cuidado a su pequeña hija de nombre Luisa Fernanda Méndez Alvarado, producto de su primer matrimonio.

En su periodo de pareja de Rogelio “N”, la señora Guillermina procreo dos hijas más, Mina Viviana Franco Alvarado y Victoria Franco Alvarado.

La señora Guillermina fue testigo de la evolución del modesto estudiante de la carrera de derecho, quien por su aparente subordinación con el entonces dueño del PRD en Veracruz, Arturo Herviz Reyes, terminó encumbrado, hasta que desde el Gobierno del Estado, lo patrocinaron para que Rogelio se apoderara de la dirigencia estatal del partido amarillo, lo que le permitió jugar un papel estelar en la elección estatal del  2016, que le llevaron a hacer alianza con el PAN y llevar a la gubernatura a Miguel Ángel Yunes Linares, apareciendo como Secretario de Gobierno en ese siniestro y pernicioso bienio.

Rogelio Franco Castán, antes ya había sido diputado local por la vía plurinominal, lo que le había permitido empezar a consolidar su emporio patrimonial y que con las alianzas que hizo con el joven Erick Lagos Hernández, el poderoso funcionario del Gobernador Fidel Herrera Beltrán le permitieron obtener millonarias utilidades.

Pero todo ese éxito político y de haberse convertido en dueño de una sólida fortuna patrimonial se veía amenazado por sus lejanos traumas de la infancia, cuando el pequeño Rogelio “N”, junto con sus hermanitos y hermana, era sacado del humilde cuartito que habitaba su señora madre Mercedes Castán González, quien cambiaba pareja cada año, dejándole de recuerdo un nuevo niño.

Los novios que llegaban a la vida de doña Mercedes, lo primero que exigían era que esos niños fueran sacados del humilde hogar, y cuando los llamaban, a Rogelio, a Balfred, o a Camilo, solo era para mandarlos por más aguardiente o cigarros sin importar la temporada.

Cuando esa orden era dada en primavera, verano u otoño no había problema, Tuxpan, el llamado puerto de los bellos atardeceres, protegía con su calor natural a todos sus hijos, hasta los pequeños hijos de doña Mercedes.

Pero cuando del pequeño y nauseabundo cuarto salía el grito aguardientoso del nuevo novio de doña Meche en invierno, finales de diciembre, enero o febrero, para ir por más aguardiente o cigarros, la orden calaba hasta los huesos a los pequeños, por el duro invierno que se deja caer en esas épocas.

Y no había opción de llorar o de rechazar la petición, porque de negarse se habrían ganado una “cinturoniza” de miedo, y con todo el cuerpo magullado de todos modos tendrían que ir por el mandado.

Y lo peor, lo contaba Rogelio, años después a Erick Lagos Hernández, con quien compartía cuarto en Xalapa, los amigos de su madre o sus novios del momento, tan solo para demostrar su fuerza y su poder frente a su señora madre, le dejaron caer varias cachetadas o zapatazos sobre su triste humanidad, mientras abrazaba a su progenitora, provocando a veces hasta descalabros o moretones en el rostro que finalmente se curaban con el tiempo pues su madre, nunca, ni siquiera le puso ni pomada de la campana ni el más modesto remedio por estar ocupada en su nueva conquista…

Esos recuerdos de infancia, fueron el tormento de Rogelio “N”, en toda su juventud, recuerdos que se agolpaban en su cerebro cuando tomaba las clases de Derecho Romano en la Facultad de Derecho de la Universidad Veracruzana.

Ni siquiera se concentraba en las materias, por esos lejanos traumas y las penurias del escaso dinero que lograba conseguir su “abuelita”, quien fue la que finalmente sacrificó sus ahorros para que su “flaco” estudiara una carrera.

Antes de que terminara la licenciatura en derecho, se juntó con la joven señora doña Guillermina Alvarado González, y en los varios años de concubinato o unión libre, aparte de procrear con ella, dos niñas más, Mina Viviana y Victoria, doña Guillermina fue víctima de los celos enfermizos de Rogelio, que empezaban con agresiones verbales y terminaban en feroces golpizas, puñetazos, y patadas.

El trauma que le tocó vivir en su infancia, los cobraba con violencia física contra la madre de sus dos hijas…

Nadie sabía de este infierno que se vivía en esta familia, salvo los muy cercanos ayudantes de Rogelio “N”, quienes en vez de ayudarlo con algún psiquiatra o psicólogo para que le atendieran su locura lo alentaban con intrigas y chismes…

Y de manera increíble, cuando Rogelio “N”, se desempeñaba como poderoso Secretario de Gobierno, doña Guillermina Alvarado González, decidió subir a su Facebook personal las evidencias de una severa golpiza que Rogelio “N” le había dejado caer, acusándolo de toda una vida de infierno a que la había sometido, procediendo a llevar a cabo la denuncia respectiva por diferentes delitos.

Obviamente, la mencionada carpeta de investigación ministerial fue archivada por órdenes del Gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, pues fiel a su estilo, no iba a permitir que por la denuncia de una mujer golpeada, que a su secretario de Gobierno le abrieran una causa penal.

Rogelio “N”, en vez de conciliar, agravió más a su esposa, amenazándola con dejarla en la calle gracias al inmenso poder de su investidura como funcionario estatal.

Sin embargo, la historia dio un giro dramático cuando el entonces gobernador panista Miguel Ángel Yunes Linares, no pudo perpetuar su poder a través de su hijo, en las elecciones locales del 1 de julio del 2018, llegando al cargo de gobernador el ingeniero Cuitláhuac García Jiménez.

La luz de la esperanza se abrió para doña Guillermina Alvarado González con esta derrota electoral y más se abrió cuando la poderosa fracción parlamentaria de MORENA, lograron destituir del cargo al Fiscal General del Estado, Jorge Winckler Ortiz, el servil y abyecto funcionario que había sido heredado en el cargo para proteger la espalda de la familia Yunes y sus empleados, entre otros a Rogelio Franco Castán.

Finalmente, el 13 de marzo del 2021, fue detenido en Tuxpan, por el delito de violencia familiar, pero acostumbrado a ejercer el poder al amparo de su cargo, agredió físicamente al policía ministerial que lo intentó esposar, lo que derivó en otro delito conocido por ultrajes a la autoridad.

Su encierro le impidió tomar posesión de la diputación federal “plurinominal” que actualmente está disfrutando su suplente Jesús Velázquez Flores.

Y a pesar de que ha logrado ganar varios amparos, no ha podido salir de la prisión, pues apenas el pasado 21 de octubre del 2022, la Fiscalía General del Estado, lo acaba de vincular a proceso como presunto responsable del delito de peculado.

Y a esa vinculación a proceso, estaría por agregársele una nueva orden de aprehensión por el delito de retención de menores.

ARQUITECTO DE SU PROPIO DESTINO

Varios periodistas y medios de comunicación, que en su momento fueron beneficiados por el bienio panista de Miguel Ángel Yunes Linares han publicado que atrás de esta nueva orden de aprehensión se encuentra la mano del Gobierno del Estado, sin embargo, el Gobierno del Estado no fue quien originalmente lo denunció, sino su señora ex esposa, doña Guillermina Alvarado González.

Cuando termina el sexenio yunista, Rogelio “N” se separa de su esposa, y le comparte algunos bienes inmuebles.

Cuando Rogelio “N” se va a vivir a una de sus muchas mansiones, su hijastra, la hija de su señora esposa, Guillermina Alvarado González, se va a vivir con su padrastro, alegando que el amor hacia su padrastro era más grande que el que podía sentir por su madre.

Rogelio, sintió que le había ganado a su esposa, pues su hija, lo había elegido como padre a pesar de que era su padrastro.

Meses después se confirmaría una terrible noticia, Rogelio “N”, terminó haciendo su pareja a su hijastra, y quien hizo la denuncia mediante una transmisión en vivo, fue la misma madre de la joven Luisa Fernanda Méndez Alvarado, doña Guillermina Alvarado González.

Cuando la hija de Rogelio “N” y Guillermina Alvarado González de nombre Mina Viviana Franco Alvarado, iba a visitar a su media hermana a casa de su señor padre, terminó por convencerla que era mejor vivir con su padre, porque había de todo, una lujosa mansión, carros  con chofer, dinero a manos llenas, ropa de marca y todos los caprichos que Rogelio “N” le cumplía a su hijastra y ahora novia del momento, pero lo más importante, era que no era obligatorio estudiar.

Y un buen día ya no regreso con su madre doña Guillermina Alvarado González.

Mina Viviana de aproximadamente 22 años, con su mayoría de edad, había decidido abandonar a su madre que le exigía seguir estudiando, para irse con su padre que le brindaba de todo sin exigirle nada, menos estudiar.

Al frente de la mansión de lujo estaba doña Mercedes Castán González, la señora madre de varios hijos con diferentes parejas, ahora en su edad senecta se había reconciliado con su hijo Rogelio N, para ayudarle a levantar a sus hijas o mejor dicho para tolerarles todos los caprichos, con el afán de ganarse su cariño y respeto.

Quien a veces las iba a visitar, era la pequeña Victoria, que, por supuesto extrañaba a su señor padre, pero también los regalos y todos los lujos que Rogelio “N” le brindaba, y un buen día, convencida por sus hermanas y su abuela, se quedó a vivir con ellas.

Cuando a Rogelio “N” le dieron la noticia en el penal, en su estúpida ignorancia y locura, creyó que con eso había derrotado a su ex esposa, pues ahora todas las hijas estaban bajo su tutela, viviendo en su casa, sin tomar en cuenta, que Victoria, por su edad, no estaba en condiciones de tomar la decisión de irse a vivir a la casa de su padre.

Desde que el conflicto familiar empezó, en el 2018, Guillermina Alvarado González, estudió la carrera de derecho en la Universidad de Xalapa, logrando egresar con excelencia académica y actualmente, está a punto de titularse de una Maestría en la misma institución, con las mejores calificaciones.

Con el conocimiento jurídico abrevado en las aulas de la UX, doña Guillermina procedió a denunciar a sus hijas, Mina Viviana Franco Alvarado, Luisa Fernanda Méndez Alvarado, a su expareja Rogelio Franco Castán y a su ex suegra doña Mercedes Castán González, quienes podrían ser aprehendidas por haber incurrido en el delito de SUSTRACCIÓN DE MENORES O INCAPACES Y LO QUE LE RESULTE de acuerdo a la carpeta de investigación ministerial UIPJ/I/DXI/FE/1296/2021 que fue iniciada el 1 de septiembre del 2021.

Historia en la que, por supuesto, nada tiene que ver el Gobierno del Estado sino la completa y estúpida ignorancia de Rogelio N, que no supo decirle a su madre, a su hija, y a su hijastra que no podían retener a Victoria, por ser menor de edad.