29 de marzo de 2024

Desarrollan Agricultura, Conaza y Colpos proyecto para el cultivo de pasto forrajero en zonas áridas del país

El programa se prevé realizarlo, en una primera etapa, en 540 hectáreas en comunidades de los estados de Sonora, Chihuahua, Coahuila, Sinaloa, Durango, San Luis Potosí y Zacatecas, así como la Comarca Lagunera, con el propósito de analizar su adaptación y dar seguimiento al desarrollo del cultivo

  • El programa se prevé realizarlo, en una primera etapa, en 540 hectáreas en comunidades de los estados de Sonora, Chihuahua, Coahuila, Sinaloa, Durango, San Luis Potosí y Zacatecas, así como la Comarca Lagunera, con el propósito de analizar su adaptación y dar seguimiento al desarrollo del cultivo.
  • Esta iniciativa está determinada en las regiones que registran sequías, bajas temperaturas y en donde las poblaciones tienen rezago económico, nutricional y de salud, por lo que la disponibilidad de proteína animal impactará de manera positiva y rápida.

Con el objetivo de disminuir el impacto de la sequía en el norte del país, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, a través de la Comisión Nacional de las Zonas Áridas (Conaza) y el Colegio de Postgraduados (Colpos), puso en marcha el programa de Establecimiento de pasto Banderita Boutelova curtipendula en zonas áridas y semiáridas de México.

La meta es incrementar la cantidad de forraje en esta región, toda vez que el pasto Banderita es de alta calidad nutricional y muy adaptable en pastizales para ganado de todas las especies, incluso para las aves y la fauna silvestre en general.

Esta planta cuenta con la característica de que es tolerante a la sequía y crece rápidamente aun cuando su sitio está dañado por sequía o pastoreo.

El programa se prevé realizarlo, en una primera etapa, en 540 hectáreas en comunidades de los estados de Sonora, Chihuahua, Coahuila, Sinaloa, Durango, San Luis Potosí y Zacatecas, así como la Comarca Lagunera, con el propósito de analizar su adaptación y dar seguimiento al desarrollo del cultivo.

Esta iniciativa está determinada en las regiones que registran sequías, bajas temperaturas y en donde las poblaciones tienen rezago económico, nutricional y de salud, por lo que la disponibilidad de proteína animal impactará de manera positiva y rápida.

Con el establecimiento de pastizales de esta variedad será mayor la captura de CO2 y la generación de riqueza renovable como es flora, carne, leche y fauna, así como la conservación de suelo y agua.

Adicionalmente, con estas acciones se atiende el impacto por erosión, cambio climático, desertificación, baja productividad primaria y reducción drástica de los pastizales, así también se considera la formación de jóvenes en el sector productivo con el fin de disminuir la pobreza económica y ecológica.

Cabe destacar que los pastos son uno de los frentes para recuperar la cobertura del suelo y la funcionalidad ecológica del pastizal árido y semiárido, ya que retienen y mantienen suelo.

Por la estructura del pasto se aprovechan también humedades ambientales en forma de neblina y precipitaciones menores de cinco milímetros, condiciones características en las zonas áridas y semiáridas.