El pasado día primero de septiembre el presidente de la república, en acatamiento de su responsabilidad republicana, rindió lo que fue el cuarto informe de gobierno en el que se da cuenta del estado que guarda la nación.
Lo que por décadas se conoció como EL DIA DEL PRESIDENTE, ha devenido, afortunadamente, en un acto sobrio y austero en el que el presidente da un resumen de las acciones de gobierno, el informe con todos sus anexos es presentado y entregado por mano del secretario de gobernación, a la cámara de diputados, para que, estos, en ejercicio de sus facultades y como poder soberano, realice lo que se conoce como La Glosa del informe.
Atrás quedaron los eventos fastuosos y llenos de boato y pompa, en el que el presidente leía ante el Congreso de la unión, el informe presidencial, una lectura cansina, llena de datos y números, cifras que nadie escuchaba con atención, obvio ante un informe tan pormenorizado, el evento era meramente político y de alabanzas, el éxito del informe se media por el número de aplausos con los que prodigaban su obsecuencia y lambisconería al presidente en turno, luego el acto vergonzoso conocido como el besamanos, una fila interminable de funcionarios del gabinete legal y ampliado, mas algunos otros funcionarios de los otros poderes, todos en filita esperando turno para estrechar la diestra del mandatario, sonrisas bobaliconas, otros que pretendían ser serios pero que comportaban en si mismo, el vergonzante acto de rendirle pleitesía a quien era, amo y señor de vidas, al gran tlatoani.
El presidente presenta un informe en poco menos de una hora, es entendible, como nunca, en un ejercicio de información diaria, el presidente da cuenta del estado que guarda la nación, de lunes a viernes, en un diálogo circular en el que se presentan logros, avances, se reconocen retrasos y en una muestra de retroalimentación, los periodistas que acuden al recinto en donde se llevan a cabo las conferencias de prensa, llamadas mañaneras, a presentar casos específicos de no aplicación de la ley o de abusos en toda la geografía nacional e incluso en los estados unidos en lo que se refiere a los migrantes mexicanos que, heroínas y héroes vivientes, han tenido una actitud noble y digna de reconocimiento, la solidaridad con sus familias en México, como nunca, las remesas año tras año rompiendo niveles históricos.
En el informe, se da cuenta de el cumplimiento de dos compromisos de campaña, a mas de otros, la entrega en tiempo y forma de el Aeropuerto civil, Gral. Felipe Ángeles, después de afrontar una lluvia de amparos, el 21 de marzo se inaugura dicho aeropuerto, construido en un tiempo récord de dos años y medio gracias a la capacidad de los ingenieros militares del Glorioso ejército nacional y de la calificada mano de obra que, como debe ser, ha sido amplia y generosamente reconocida por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El otro gran reto, la terminación de la primera fase de la refinería OLMECA, en Dos Bocas, Paraíso, Tabasco, obra emblemática ya que la última refinería que se había construido en México, databa de hace 43 años, una verdadera vergüenza, la refinería de Salina Cruz en Oaxaca se construyó en 1979, si consideramos que, en los sexenios mal halados del panismo, con dos bribones al frente del poder ejecutivo, de cuyos nombres ni siquiera vale la pena recordar, se tuvo la mayor renta petrolera en la historia del país, para que alcanzó esta enorme renta producto de la venta petróleo crudo?, para construir una barda en el estado de Hidalgo, barda que representa la indolencia, el cinismo y el descaro de esas administraciones, por fortuna hoy, hoy más lejos que nunca de la posibilidad de que regresen, la nueva refinería tendrá una capacidad de refinación de 340,000 barriles diarios de crudo, con la compra de la refinería en Deer Park en Texas y la rehabilitación de las seis que operan en el país, el compromiso de la autosuficiencia en materia de combustibles, se honrara, como lo ha dicho el presidente, en el año del 2023, como dicen en los pueblos, OBRAS SON AMORES.
A más del cabal cumplimiento de estas dos de las cuatro obras emblemáticas de este gobierno, el presidente dio cuenta de acciones que han redundado en el bienestar de millones de compatriotas, especialmente los más pobres.
A continuación, cito algunos de los datos y cifras pronunciadas por el presidente en el discurso del día primero de septiembre con motivo del cuarto informe de gobierno.
“Los Programas para el Bienestar permitieron que los adultos mayores, de 2018 a 2020, incrementaran su ingreso promedio trimestral por persona de 12 mil 420 pesos a 13 mil 586 pesos; en cuanto a la población indígena, pasó de un ingreso trimestral por persona de 8 mil 887 pesos a 10 mil 057 pesos, es decir, 13.16 por ciento más. Según el CONEVAL, en el segundo trimestre de este año, el ingreso laboral real por persona se incrementó en 4.8 por ciento pues pasó de 2 mil 747 pesos a 2 mil 880, en comparación con el mismo periodo de 2021.”
“Es indudable que el principal distintivo del gobierno que encabezo y que coordino con el apoyo de todas y todos ustedes, servidores públicos, el principal distintivo son los Programas para el Bienestar orientados a mejorar las condiciones de vida y de trabajo de la mayoría de la población y cuya prioridad, sin ninguna duda, son los pobres. Es una realidad virtuosa el programa de la pensión a 10 millones 500 mil adultos mayores; también la pensión a un millón de niñas y niños pobres con discapacidad que se está ampliando a otras edades con la celebración de convenios con los gobiernos estatales y pronto este programa tan humano, será universal; se otorgan becas a 11 millones de estudiantes desde preescolar hasta posgrado; 2 millones 315 mil jóvenes han trabajado como aprendices, recibiendo un ingreso equivalente a un salario mínimo, de todos ellos, la mitad termina, cuando terminan de formarse, de capacitarse, son contratados por la empresa o centro de trabajo donde se ejerció la tutoría; de igual forma se apoya con un jornal permanente a 449 mil 570 sembradores que trabajan cultivando sus tierras, sea ejidales o pequeñas propiedades en una extensión total de 1 millón 123 mil 925 hectáreas, organizados en 18 mil 615 Comunidades de Aprendizaje Campesino, con 15 mil 132 viveros y biofábricas en 21 estados de la República.“
Este gobierno entiende como inversión y no como gasto, los recursos que se destinan a los programas sociales, el resultado de esta política se evidencia con el fortalecimiento del mercado interno, esto ha permitido mantener el consumo, mantener y elevar los niveles de recaudación y sobre todo, ha generado las condiciones para evitar inconformidad y estallidos sociales, el país esta en paz y trabajando los números en otras áreas de la administración así lo reflejan, sin embargo a decir del presidente, hay un rasgo distintivo de este gobierno, sin poder ocultar el orgullo y la satisfacción que esto le produce, citaremos tal como las pronuncio, las siguientes palabras, llenas de optimismo, certeza y esperanza.
“A estas alturas del sexenio; a dos años y un mes de terminar mi mandato todavía nos falta tiempo y nos va a tocar celebrar, vamos a celebrar muchas otras cosas buenas en beneficio del pueblo y sobre todo se va a consolidar la transformación que estamos llevando a cabo millones de mexicanos. Hasta ahora, en una apretada síntesis podemos destacar los siguientes logros:
1. En México ya no domina la oligarquía sino existe un
gobierno democrático, cuya prioridad son los pobres.
2. La corrupción no se tolera ni hay impunidad para nadie.
3. Se acabaron los privilegios fiscales.
4. No hay lujos en el gobierno y los servidores públicos
actúan con eficiencia, responsabilidad y honradez; viven en la justa medianía,
como lo recomendaba el presidente Juárez.
5. México está recuperando su prestigio en el mundo.
6. El Estado dejó de ser el principal violador de los
derechos humanos.
7. El aumento al salario, el reparto de utilidades y
los Programas para el Bienestar se han convertido en nuevos
y eficaces medios para la distribución más justa de la riqueza.
8. Se elevó a rango constitucional la pensión para adultos
mayores, el apoyo universal a discapacitados y el otorgamiento de becas a
estudiantes de familias pobres.
9. Está por convertirse en realidad el principio de que la
educación y la salud no son privilegios, sino derechos del pueblo.
10. Estamos ganando la batalla contra el racismo, el clasismo y la discriminación.
11. Hemos reducido la incidencia delictiva.
12. Son pocas las manifestaciones de protesta no proliferan las huelgas ni existe
ingobernabilidad.
13. Se garantiza como nunca la libertad de expresión y el derecho a disentir.
14. El gobierno no participa en fraudes electorales.
15. La fiscalía general de la República, y los poderes Legislativo y Judicial actúan
con absoluta independencia.
16. El peso no se ha devaluado.
17. Han aumentado las reservas del Banco de México en 14 por ciento.
18. Existe libertad religiosa y Estado laico.
19. Se está demostrando que la mayor riqueza de México es la honestidad de su pueblo.
20. Y ahora más que nunca, está presente que México es de los países con mayor
riqueza cultural en el mundo; está más presente que nunca la grandeza cultural
de México.
Amigas y amigos:
Les confieso que ahora poseo más aplomo y serenidad que antes; ha crecido aún más mi respeto y amor al pueblo; creo con racionalidad, mística y optimismo, que triunfará la Cuarta Transformación de México y en lo personal me siento bien y de buenas. Estoy feliz porque la revolución de las conciencias ha reducido al mínimo el analfabetismo político. Gracias a los servidores públicos que me acompañan y a todas y todos los mexicanos por participar en esta odisea en pos de la felicidad del pueblo y la prosperidad de la patria. Lejos, muy lejos de la pompa y la frivolidad de sexenios ya pasados, lejos del oprobioso besamanos, hoy tenemos un compañero en la presidencia de la república, un presidente que se jacta de ser feliz, hoy son la prosperidad de la patria y la felicidad del pueblo, las más caras divisas de este gobierno humanitario y justo, hoy, hoy la patria con el vino tinto, color de la esperanza, de la certeza y del rumbo.